viernes, abril 19, 2024

Con el paso de las horas se va aclarando el panorama alrededor de la muerte de Halyna Hutchins, la directora de fotografía del western Rust, que falleció por un disparo de un arma de utilería empuñada por el actor Alec Baldwin.

El accidente está siendo investigado por múltiples organismos estatales y privados. El departamento de policía de la ciudad de Santa Fe (en el estado de New Mexico) interrogó a los involucrados y está haciendo análisis forenses sobre el set en el que se estaba grabando la escena en la que ocurrió el disparo. La empresa montada para producir la película, Rust Movie Productions, LLC hará una investigación interna a la vez que ofrece a los miembros del equipo y elenco servicios de asistencia para su salud mental.

Aunque la policía habló con Baldwin y con el armero de la película, aún no ha hecho arrestos ni presentado cargos. Esto, sin embargo, no libera a la producción de responsabilidad. Ayer se anunció que la Oficina de Seguridad y Salud Ocupacional de New Mexico también está investigando el hecho y podría imponer multas aunque la investigación policial dictamine que no hubo un crimen.

El accidente ocurrió con la iglesia construida en el set del rancho Bonanza Creek.

Todavía no queda claro qué fue lo que provocó la muerte de Hutchins. Si fue una bala real dentro del arma de utilería modificada, un fragmento de la salva, u otro objeto. Según la declaración jurada de Baldwin, citada en un diario local, el asistente de dirección de la película recogió una de tres armas de utilería preparadas en un carrito fuera del set de la iglesia en que se estaba grabando. Al entregarla al actor, el asistente gritó “¡cold gun!” (“arma fría”), una expresión que indica que el arma fue chequeada y no tiene balas reales.

Luego del accidente, el arma quedó en manos del armero de la producción, que retiró el casquillo usado. El informe no especifica si la policía lo recuperó posteriormente. La policía se llevó todo el material que podía ser usado, desde tarjetas de memoria de las cámaras hasta el vestuario utilizado por los actores. El informe también confirma que el disparo fue en un ensayo, por lo que podría no haber imágenes del momento del accidente que ayuden a aclarar lo que ocurrió.

La filial de utileros (número 44) del gremio de trabajadores de televisión IATSE asegura que el accidente fue causado por una bala real mezclada entre la munición de salva. El comunicado también agrega algo preocupante: ninguno de los miembros de esta filial estaba trabajando en la película, sino que el equipo estaba formado por operarios locales del área.

Baldwin acompañó a los uniformados a dar declaración. Fotógrafos de un diario local capturaron conversaciones que tuvo en una pausa del interrogatorio.

El medio especializado Variety reveló que la producción estaba en caos aún antes del accidente. La película empezó a filmarse el 6 de octubre, y se reportaron distintos problemas de seguridad desde el principio. El mismo día de la muerte de Hutchins, varios de los profesionales de IATSE contratados renunciaron al ver un mal manejo de armas, y la reacción de la producción fue sacarlos con seguridad. Estas denuncias podrían generar una investigación por parte del gremio, que acaba de negociar un nuevo contrato colectivo con representantes de la industria.

Más allá de la investigación, el impacto humano es devastador. Baldwin expresó su dolor por lo ocurrido en una carta en su cuenta de Twitter, explicando que está colaborando con la policía en todo lo que puede y ofreciendo su apoyo al viudo de Hutchins.

La situación del actor es compleja, ya que también es el productor de la película, junto a colaboradores como su manager Matt DelPiano, la dupla de Ryan Winterstern y Nathan Klingher, y el también actor Anjul Nigam.

Hutchins tenía 42 años. Estaba casada y tenía un hijo.

Matthew Hutchins, viudo de la víctima y padre de su hijo, declaró al medio The Insider que no tiene palabras para describir lo que ocurrió, y que agradece las muestras de afecto de los colegas y amigos de Halyna, pero por lo pronto no va a comentar sobre el hecho.

Si algo positivo puede salir de este hecho lamentable, es que se mejoren las condicioens de seguridad de otros sets. La producción de la serie The Rookie, del canal ABC, se convirtió en la noche del viernes en la primera en prohibir el uso de armas reales o modificadas. El productor Alexi Hawley hizo público un memo en el que se establece que se usarán reproducciones de armas tipo Air Soft, con flashes agregados en postproducción: “La seguridad de nuestro elenco y equipo es demasiado importante. Cualquier riesgo es demasiado riesgo”.

Esperemos que sea la primera de muchas producciones en adoptar esta medida. Por su parte, el American Film Institute (academia en la que estudió la directora de fotografía) inició un programa de becas bajo el nombre de Hutchins. No será olvidada.

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Escritora, community manager y entrevistadora. Fan de Superman, team DC, puede hablar a base de frases de Friends o Los Simpson.