domingo, diciembre 21, 2025

Hay obras cinematográficas que nunca terminan de refinarse o se cruzan con obstáculos que no lo permitieron al momento de su estreno original. Por suerte existen los “cortes del director” que, en muchos casos (sino, la mayoría), rescatan la verdadera visión del realizador –restringida por cuestiones de tiempo, calificación o caprichos del estudio– y hasta mejoran la versión que llegó a las salas.

‘Más’ no siempre es ‘mejor’, pero no podemos negar que esas escenas adicionales, a veces, añaden coherencia o cambian la percepción de una historia que, en principio, y ante ciertos ojos críticos, no parecía tan buena.    

LA TRILOGÍA DEL SEÑOR DE LOS ANILLOS (THE LORD OF THE RINGS)

La obra cumbre de J. R. R. Tolkien llegó a la pantalla grande de la mano de Peter Jackson y dejó una marca imborrable en la historia cinematográfica y la cultura pop. El proceso no fue fácil, y casi 25 años después todavía sigue mutando, al menos, cada vez que el director decide sacar una nueva “edición especial” agregando algún detalle o escena que se quedó en la sala de edición. 

Originalmente, La Comunidad del Anillo llegó a los cines en diciembre de 2001 con una duración de 178 minutos y sumó hasta 50 minutos adicionales en versiones posteriores de formatos caseros. Lo mismo ocurrió con sus continuaciones, añadiendo hasta una hora más de película en El Retorno del Rey. Imposible listar todos los momentos que Jackson agregó o retocó con el tiempo, pero hay que destacar que todas estas versiones tuvieron su paso por el cine, inclusive, en maratones solo aptas para verdaderos fanáticos. 

CRUZADA (KINGDOM OF HEAVEN, 2005)

La historia de Balián de Ibelín (Orlando Bloom), tal vez, no tiene mucha exactitud histórica, pero se las ingenia para mostrarnos los conflictos políticos y religiosos que se vivían en Tierra Santa, y más allá, durante las cruzadas del siglo XII. Ridley Scott no quedó muy satisfecho con la edición que llegó a los cines en mayo de 2005, un corte dependiente de los caprichos de las audiencias de prueba, que le quitaron a la película unos 45 minutos del metraje original. Meses después de su estreno, Scott lanzó la que creía era la versión definitiva de su film. 

Esta nueva historia, mucho más épica y centrada en sus personajes, encontró el favor de la crítica, que tampoco había quedado conforme con la primera versión. Tanto fue así que, para muchos, se convirtió en el director’s cut más “substancial” de todos los tiempos; uno que pone a Cruzada a la altura de los mejores trabajos del realizador.

SUPERMAN II: THE RICHARD DONNER CUT (1980/2006)

Recordemos que la producción de esta secuela comenzó junto con el rodaje de la primera entrega, allá por 1977, pero pronto empezaron los problemas entre los directivos, por lo que la película se postergó dejando que Richard Donner se concentrara en terminar ese opus superheroico conocido como Superman (1978). Richard Lester terminó reemplazándolo en la dirección que, según se estima, ya estaba completada en un 75%, pero Donner tuvo su revancha en 2006 con un digno director’s cut: una versión más coherente y con escenas de Marlon Brando que, por aquel entonces, se creían perdidas. 

Las diferencias son mínimas, pero le hacen más justicia al Hombre de Acero que, en esta oportunidad, se humaniza un poco más y debe enfrentar a tres villanos kryptonianos –incluido el general Zod de Terence Stamp– que escapan de la Zona Fantasma y llegan a la Tierra para hacer estragos.

APOCALYPSE NOW REDUX (2001)

El director’s cut que dividió las aguas. De por sí, es un milagro que Francis Ford Coppola haya podido terminar la primera versión de Apocalipsis Now (Apocalypse Now) en 1979; por lejos, una de las mejores películas bélicas de todos los tiempos. En el año 2001, el realizador se dio el lujo de lanzar este montaje ‘definitivo’, que incluye 49 minutos adicionales con escenas eliminadas. 

Algo que no hubiera estado del todo mal, salvo por un detalle: la interminable secuencia en la plantación de caucho de los Marais, vestigios de la colonización francesa, y toda una excusa para mostrar a los hijos del director interpretando a los pequeños de esta familia. Así, la peligrosa odisea del capitán Willard (Martin Sheen), quien debe infiltrarse en territorio camboyano para encontrar y eliminar al renegado coronel Kurtz (Marlon Brando), adquiere un impacto muy diferente y una duración total de 202 minutos.

THE ABYSS: DIRECTOR’S CUT (1989)

No es ningún secreto que la filmación de El Secreto del Abismo (The Abyss) fue un tormento para los protagonistas, pero la versión que llegó a los cines en 1989 tampoco dejó contento a James Cameron, quien más tarde hizo sus propias modificaciones. La versión extendida de esta gran fantasía ignorada por la historia, también se hace eco del creciente conflicto bélico entre los Estados Unidos y la Unión Soviética, agravados por el hundimiento del Montana. 

Acá, la relación entre Bud y Lindsay es un poco más complicada (teniendo en cuenta su pasado) y los aliens no son tan pacíficos como se cree, ya que están dispuestos a inundar las costas del mundo con una gigantesca marea, en parte, como advertencia por la violenta naturaleza que ha mostrado el ser humano a través de los siglos. 

Jefa de redacción. Nolaniana incurable. DC me da y me quita.