Kevin O’Leary, co-estrella de Timothée Chalamet en Marty Supreme, explica como el no uso de Inteligencia Artificial le costó millones a la producción.
Nos guste o no, la IA llega para quedarse, y en la industria del cine y la televisión, es cada vez más frecuente el uso de estas herramientas para facilitar el trabajo y reducir costos. Sin embargo, y con razón, no todos los directores están dispuestos a utilizar esta tecnología dentro de sus producciones.
La próxima biopic de A24, Marty Supreme, es uno de los ejemplos. Kevin O’Leary, una celebridad de televisión conocido por su rol en el reality de negocios Shark Tank, explicó cómo la utilización de Inteligencia Artificial pudo reducir los costos del film para el estudio, dando una opinión bastante controversial sobre estas tecnologías (vía The Hill):
“Casi cada escena contaba con hasta 150 extras. Esas personas tienen que permanecer despiertas durante 18 horas, completamente vestidas, en segundo plano. No necesariamente en la película, pero son necesarias para estar allí moviéndose. Y, sin embargo, cuesta millones de dólares hacerlo. Así que, cuando rodamos en un bistró francés, todos los actores secundarios detrás, o al menos los extras, hablaban francés.
¿Por qué no se podía simplemente poner agentes de IA en su lugar? Porque no son los actores principales. Sólo aparecen en la historia visualmente, y ahorrar millones de dólares, para poder hacer más películas. Ese mismo director, en lugar de gastar 90 millones de dólares o lo que fuera, podría haber gastado 35 millones y haber hecho dos películas”.
Si bien el planteamiento del actor parece lógico, las implicaciones de utilización de dobles generados por IA ya fueron puestas en evidencia durante la huelga de actores en 2023, por lo que el uso no regulado de estas herramientas podría ser catastrófico para la industria.
La película, dirigida por Josh Safdie, se centra en la vida de Marty Reisman (Timothée Chalamet), un pasante de apuestas que descubre su pasión por el ping-pong. Comenzando en clubes clandestinos, su estilo intrépido y carismático lo llevó a ganar 22 importantes títulos, representando además a Estados Unidos en torneos mundiales y siendo el campeón más veterano en este deporte con 67 años.












